Bronca, desamor, quilombo emocional y la certeza de que a todo el mundo le pasa. Clara Cava canta para entenderse y sobrevivir. Ahora presenta A todo el mundo le pasa, un disco nacido de la crisis y la aceptación, mientras prepara nuevas canciones. Por Oke Sauny
“¿Quién es Clara Cava? Una señora ya, pues ya cumplí 31 años el sábado”, arranca la cantante entre risas. Directa, honesta. La conversación fluye porque ella habla. Desde que en 2015 decidió subir al escenario con sus propias canciones, Clara no paró de escribir, grabar y buscarle un sentido personal a la música.
Su historia empezó sin covers ni bandas de tributo. “La primera vez que toqué en vivo fue tocando mis canciones. Cuando sentí que tenía temas que me enorgullecían, los mostré”. Así llegó Antibiótico, su primer EP, producido junto a su primo Manu, que le abrió puertas y le dio ese empujón inicial en la movida independiente.
Clara se reconoce más compositora que intérprete. “Mi poder está en eso. Hago más lo que se me canta el culo y a mi manera. Cantar canciones de otros me cuesta mucho más que escribir las mías”. Su brújula creativa siempre fue escribir para entender(se): los vínculos, los duelos, el caos interno.
Los “quiebres” marcaron su camino: el salto de animarse a tocar en vivo, la salida de Antibiótico, y el 2020 como punto de partida. En plena pandemia lanzó el EP Lavandina y el álbum Martes 13, dos discos que consolidaron su voz y la subieron a los carteles de festivales como Lollapalooza, Cosquín Rock y Primavera Sound. Ese mismo año fue elegida Artista Radar por Spotify y hasta abrió un show de Coldplay en River: “Fue bastante épico”, recuerda.
A todo el mundo le pasa
En 2025 editó A todo el mundo le pasa, un disco nacido de la crisis y el aprendizaje. “Me di cuenta de que todos pasamos por malas rachas. Seas quien seas, en algún momento te toca. Y eso me bajó a tierra, me hizo empatizar más conmigo misma”. El álbum mezcla introspección, euforia y quilombo emocional. Un recorrido de “bronca, odio, euforia y del azul al negro” que concluye con esa aceptación: a todo el mundo le pasa.
La grabación le llevó más tiempo del esperado y hasta se agotó de escuchar sus propias canciones. Pero ahí aparece el vivo como salvación: “El audio es una cosa y la canción es otra. En el escenario vuelve a resignificarse. Si un tema me harta, no lo toco, y listo”.
“Tengo muchas canciones nuevas y estoy preparando un disco. Quiero volver a sacar música más rápido, como antes. Que el lanzamiento me encuentre cebada con lo que estoy mostrando”.
Clara explora dos mundos que conviven en su obra: la intimidad acústica y la potencia de la euforia. Ese doble pulso atraviesa su presente creativo. “No tengo más que eso: seguir componiendo, sacar música y dejar que el destino me lleve”.
Con 31 años recién cumplidos, Clara Cava sigue siendo esa artista que eligió mostrar sus propias canciones desde el primer día. Con la crudeza de quien hace música para entenderse y sobrevivir.
Clara Cava vuelve al escenario con toda su crudeza y frescura. Conseguí tus entradas en alpogo.com y viví en vivo cada uno de sus shows..